“What I like about photographs is that they capture a moment that’s gone forever, impossible to reproduce.”_ Karl Lagerfeld
Trabajar con dos bebés en una misma sesión siempre es un pequeño reto, pero de los que se disfrutan. Lara llegó al estudio con apenas unos días, acompañada por su hermano Mateo, que todavía es también un bebé. Y, aunque a veces estas sesiones familiares requieren un poco más de paciencia, Mateo nos sorprendió: estuvo cariñoso, curioso y con una ilusión preciosa por participar. A él también le hicimos su sesión newborn cuando nació, así que volver a ver a esta familia, ahora con un nuevo miembro, fue muy especial. Hay algo mágico en acompañar a las familias en cada etapa, ver cómo crecen y cómo los hermanos comienzan a compartir momentos desde tan pequeños.
Cada vez me atraen más los colores intensos para la fotografía newborn. El mostaza que eligieron para Lara llenó las imágenes de luz y alegría, y le sienta genial a su tono de piel. Es un color con carácter, que transmite energía sin perder dulzura, y que aporta un punto diferente a las sesiones de recién nacido.
Me gusta pensar que cada familia que vuelve trae consigo un pedacito de mi historia también. Ver crecer a Mateo y conocer a Lara me recordó por qué amo tanto la fotografía newborn: porque no se trata solo de imágenes, sino de acompañar la vida mientras sucede.
Si estás pensando en realizar una sesión newborn o de familia, lo ideal es planificarla durante el embarazo, para poder hacer las fotos en los primeros días de vida del bebé, cuando todavía conservan ese sueño profundo y sus movimientos suaves y tiernos. Mi estudio está en Santiago de Compostela, y puedes encontrar toda la información sobre las sesiones de recién nacido en esta página: SESIONES NEWBORN
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar los servicios y mostrarte publicidad relacionada con tus hábitos de navegación. Si sigues navegando, consideraremos que aceptas su uso.